GLORIA SWANSON

¡Como no darle un espacio a la Diva por excelencia! En este blog dedicado a estas inalcanzables mujeres no debía faltar ella; Gloria encarnó mejor que ninguna el papel de estrella, e instauró un tipo de vida que muchas siguieron después. Para ser una diva en el amplio sentido de la palabra, debías seguir unas pautas…tener un determinado comportamiento. Swanson amasó rapidamente una inmensa fortuna,que por otra parte despilfarró temerariamente , su vida amorosa, como toda estrella que se precie, fue ajetreada y escandalosa, y su retiro del cine fue algo temprano; decidió abandonar por voluntad propia cuando aún conservaba su fama y su glamour intactos. Bastantes años después de su escapada voluntaria, volvió triunfante al cine de la mano del maestro Wilder ¡Qué mejor que una auténtica diva del cine mudo ,para interpretar el personaje de una madura actriz sumergida en su glorioso pasado! Dejó a todos impresionados… demostró el  particular sello de una época, ya pasada, pero no por eso menos deslumbrante.

El caso de Swanson, fue muy especial; no fue para mi gusto una gran actriz, quizás era demasiado exagerada en sus gestos….sumamente histriónica, pero lo cierto es que peleó con uñas y dientes para conseguir un puesto en el firmamento del cine, y de hecho lo consiguió con creces. Su gran estilo, cuentan que anualmente sus facturas en abrigos de piel, vestidos y perfumes eran escándalosas ,su fuerte carácter, su manera de posar ante la cámara, y por encima de todo su mirada perturbadora, la convirtieron en una de las leyendas más grandes del cine.

Gloria nació a finales del siglo XIX, concretamente en Chicago un 27 de Marzo de 1899. Su infancia transcurrió en diferentes ciudades como Chicago, Puerto Rico y Florida. El primer trabajo que tuvo Gloria, fue el de dependienta en unos grandes almacenes, ya que por aquella época aún no tenía en mente dedicarse al mundo del espectáculo. Un tiempo más tarde y con tan sólo 15 años, apareció como extra, más por diversión que por otra cosa, en “The Soung of Soul” (1914). Inmediatamente despertó el interés de los estudios de cine, y se le ofrecieron varios contratos entre los que se encontraban varios papeles en películas del famosísimo Charlie Chaplin. Aunque en un principio Chaplin pensó darle un papel protagonista, cambió de parecer al hacerle una prueba, para seguidamente ofrecerle un pequeño papel que dejó a Gloria algo desencantada; años después comentó que odiaba este tipo de películas cómicas en las que lo más importante eran las majaderias y los golpes. Trás estas incursiones en el cine que pasaron prácticamente inadvertidas, Cecil B. deMille, la convirtió en su musa, y le dió el protagonismo que merecía en producciones como  “Macho y hembra” (1919),”No cambies de esposo” (1919),¿Porqué cambiar de esposa”(192o), o “El señorito primavera” (1921); aunque años antes Swanson había despreciado de alguna manera las comedias de Chaplin, lo cierto es que el único film con algún tinte dramático que protagonizó junto a tan emblemático director fue le primero de ellos, ya que los siguientes títulos fueron todos de género cómico.

Sin embargo el director Sam Wood, le ofreció un drama llamado “Más fuertes que su amor”(1922), en el cual apareció junto a uno de los personajes más míticos de toda la historia del cine: Rodolfo Valentino.

El año 1928, fue el año de la primera ceremonia de los Oscars, y Gloria la estrenó triunfante, pues consiguio una nominación como mejor actriz, en un drama llamado “La frágil voluntad”.

Ya casi agonizando el cine mudo, Gloria apareció en “La reina Kelly” , una producción considerada de las más emblemáticas de esta época, y en la que incluso llegó a invertir gran parte de su capital, que finalmente y debido a numerosos conflictos surgidos entre Gloria y el director le ocasionaron muchas pérdidas económicas.  Por otra parte muchos críticos consideran que Gloria consigue una de sus mejores interpretaciones en esta película; como anécdota contar que la película aparece en una de las secuencias de “El crepúsculo de los Dioses”, concretamente en la que que Norma Desmond (personaje que interpreta Swanson) proyecta en una sesión privada una cinta de sus años gloriosos en el cine mudo; Billy Wilder lo hizo como homenaje hacía Stroheim, director de “La reina Kelly”.

Su primera incursión en el cine sonoro se produjo con “La intrusa”(1929), y lo cierto es que tuvo una muy buena acogida entre público, por lo que La Metro, le ofreció un muy interesante contrato. Pero aún con todas estas favorables perspectivas profesionales, su imágen fue perdiendo el gran interés que suscitaba en sus comienzos, y tras su aparición en “Música en el aire”(1934), se retiró temporalmente, pues pensaba que el cine que se filmaba en aquella época, ya no era merecedor de su glamourosa presencia.

Pasaron casi veinte años, hasta que de nuevo Gloria decidiera prestar su carisma a la gran pantalla, y su regreso se produjo con la obra que definitivamente  la imortalizaría en el celuloide, y que haría de ella una leyenda, aún más grande: “El crepúsculo de los Dioses” (195O). Desde el primer momento Billy Wilder, director de la película, supo que la protagonista de esta obra maestra tenía que ser ella, y su convicción hizo que el nombre de Gloria quedara por siempre ligado a la eternidad del cine. En la película, Gloria interpretó el personaje de una diva del cine mudo encerrada en su propio pasado, y a los comentarios surgidos de que bien podría tratarse de una biografía de su propia vida, Gloria declaró : “Es increíble, que la gente que me conoce bien pueda pensar que este film es autobiográfico. Que yo sepa, no tengo a nadie muerto flotando en mi piscina”, contestó ironicamente al preguntarle sobre las curiosas coincidencias sobre el personaje de Norma Desmond y ella misma.  El personaje fue interpretado magistralmente por Gloria, y su actuación le supuso una tercera nominación a los Oscars; finalmente la estatuilla le fue arrebatada por Judy Holliday por su interpretación en “Nacida ayer”.

Con esta cinta llegó el auténtico crepúsculo para Gloria, y la verdad es que no insistió mucho más en aparecer en la gran pantalla, pues como aseguró en unas declaraciones: “No pretendo pasarme el resto de mi vida haciendo de Norma Desmond una y otra vez”.

En el año 1956, y al lado de Alberto Sordi apareció en una comedia italiana llamada “Mi hijo Nerón”, y en el año 1975 efectuó una parodia de sí misma en “Aeropuerto 75″,  en lo que fue un film muy criticado por su mediocre y previsible guión.

Su vida sentimental fue sumamente agitada, ya que se casó 6 veces, y entre medio de estos matrimonios se la relacionó con el patriarca de los Kennedy Joseph Patrick, padre del malogrado JFK. Su ultimo matrimonio se produjo cuando contaba con 76 años, y su marido fue un hombre treinta años más joven que ella.

En 198o, sorprendió a todos con la publicación de sus memorias “Swanson sobre Swanson”, donde explicaba con todo lujo de detalles sus amoríos, haciendo hincapié principalmente en el que me mantuvo con Kennedy, debido a lo escandaloso que fue en su época, ya que ambos estaban casados, interviniendo incluso el cardenal de Boston para disuadir a la actriz de continuar tan pecaminosa relación.

Como vemos su vida profesional y su propia vida privada, fueron cogidas de la mano…. su carácter impetuoso y caprichoso de diva se manifestó en su vida real, tanto como en la ficticia.  Pero finalmente Gloria consiguió su propósito… en su momento fue una actriz muy reconocida y admirada, y tantos años después de su nacimiento, se sigue hablando de ella, y se sigue admirando su trabajo. Como dijo una vez .”Yo sigo siendo grande, son las películas las que se han hecho pequeñas”.

Murió en Nueva York un 4 de Abril de 1983 de muerte natural, una muerte dulce y tranquila, nada equiparable a su pasional e impetuosa vida.