Anne no tuvo una belleza llamativa, no fue una mujer de formas exuberantes ni físico particularmente llamativo, pero ni falta que le hizo, ya que lo cierto es que despertó mayor interés entre el público que si hubiera contado con todos estos atributos .
Su rostro tenía magnetismo; era una de esas mujeres que pasan desapercibidas entre la gente, pero sólo hasta que te paras a mirarlas un sólo instante.
Supo encajar con naturalidad y elegancia el paso del tiempo, que lejos de estropear ese halo tan personal del que era dueña , aún lo agudizó más. Se convirtió para muchos señores, en la mujer madura más seductora que vieran jamás en el cine gracias a la película “El graduado”, que aunque fue la que la consagró definitivamente en el cine, también eclipsó de alguna manera sus otros trabajos, que por cierto estuvieron por encima de la calidad que le pedía la industria.
Así, en un primer momento, los estudios de cine quedaron desconcertados con el buen hacer de esta atractiva mujer, y en muchas ocasiones no supieron siquiera en qué tipo de género situarla. Pero el arte siempre se muestra de alguna manera, y Anne contó con la peculiaridad de saber mostrar su calidad como actriz, tanto en películas mediocres como en obras maestras; en estas últimas derrochó talento por todos sus poros, y fueron las que ,sin ninguna duda, le hicieron conocer la gloria y también comprobar que por fin su gran talento era reconocido.
Anne nació un 17 de Septiembre de 1931 en el barrio del Bronx (Nueva York), siendo hija de inmigrantes italianos.
Anne nació un 17 de Septiembre de 1931 en el barrio del Bronx (Nueva York), siendo hija de inmigrantes italianos.
A muy temprana edad , con tan sólo cuatro años, sus padres la matricularon en una escuela para que recibiera clases de interpretación, pues la pequeña demostraba una capacidad especial para desenvolverse en este arte. Más tarde, también pudo perfeccionar su talento en La Academia de Arte Dramático de Manhattan, o en el Actor’s Studios, ésta última conocida por ser dirigida por Lee Strasberg, este profesor se hizo bastante popular al convertirse en el pigmalión de Monroe, y por ser una de las escuelas por las que pasaron nombres muy importantes como por ejemplo Marlon Brando,
Su debut cinematográfico se produjo precisamente junto a la inolvidable Marilyn en “Niebla en el alma”(1952), pero su papel no fue destacado, ya que la película giró en torno a la rubia actriz,
En “Demetrius y los Gladiadores”, (1954), apareció al lado de figuras ya consagradas como Victor Mature o la magnífica Susan Hayward, en lo que fue un pequeño pero determinante papel , ya que pudo mostrar su gran calidad artística.
También fue notable su participación en un film de cine negro llamado “Al caer la noche”(1956), que aunque no fue uno de los mejores títulos que se rodaron de este género, le dio la posibilidad de brillar con luz propia.
De esta manera , durante la década de los años 50, Anne siguió interpretando personajes que aunque no le reportaron ningún éxito mencionable, por lo menos le procuraron un sitio en la industria del cine, cosa que era realmente difícil en un mundo invadido por exuberantes y bellísimas damas.
Mas con la década de los 60, llegaría para Anne la película que la inmortalizaría en el cine, y en la que pudo demostrar que su perseverancia y su talento por fin daban sus frutos. Con “El milagro de Ana Sullivan” (1962), enamoró al mundo entero. ¿Cómo era posible que tan gran actriz hubiera pasado prácticamente desapercibida, hasta ese momento? Anne brindó al publico una interpretación majestuosa, sobria, sencilla y natural que asombró a la crítica, y por la que recibió un premio Oscar de la Academia, una nominación a los Globo de Oro, y un premio Bafta como mejor actriz dramática.
La película es una obra maestra y ha sido catalogada por los críticos como una de las 50 mejores películas de toda la historia del cine.El film, basado en una hecho real, cuenta la historia de una niña que a causa de una meningitis queda ciega y sorda, y como, gracias a una maestra llamada Anna Sullivan, consigue superar junto a ella, obstáculos que en un primer momento se pensaban insalvables, llegando con el paso del tiempo a obtener logros increíbles.
Esta película encumbró a Anne en lo más alto del panorama cinematográfico, y marcó un antes y un después en su carrera. A partir de éste momento se enfrentó a papeles muy complicados, y de gran dificultad psicológica, como en el caso de “Siempre estoy sola” (1964), donde nuevo demostró su gran capacidad para el drama, y con la que consiguió una nominación a los Oscar, y un Globo de Oro como mejor actriz dramática, o “La vida vale más”(1965), donde interpretó el papel de una mujer depresiva y con tendencias suicidas
En el año 1966, trabajaría en la que sería la última película rodada por John Ford, y que se llamó “Siete mujeres”
Un año después llegó para Anne, una película muy arriesgada y vanguardista para la época, y que haría resurgir de nuevo su nombre de manera mundial. Con “El graduado” (1967), se adentró en la vida de la señora Robinson; una mujer madura que vuelve a saborear la locura de la juventud , gracias a un chico mucho más joven , papel que interpreta un novel Dustin Hoffman, y con el que inicia una tórrida relación de verano.
Aunque ahora, con los tiempos que vivimos, veamos de lo más inocente la historia, en aquél año de 1967 supuso toda una temeridad rodar esta película.
Personalmente me parece que no ha perdido ni un ápice del modernismo que tan famosa la hizo en su época, y sus planteamientos argumentales, tantos años después, siguen estando vigentes en la sociedad actual. También hay que destacar la magnífica banda sonora, Mrs Robinson, compuesta expresamente por Simon and Garfunkel para la película. Por su maravillosa interpretación Anne obtuvo una nominación a los Oscars y otra a los premios Bafta, siendo ganadora de un Globo de Oro como mejor actriz.
En la década de los setenta apareció en varios títulos siendo los más destacables “El prisionero de la Segunda Avenida” (1977), junto a Jack Lemmon y ,un aún desconocido, Sylvester Stallone, “La última locura”(1976), una original y divertida comedia dirigida por Mel Brooks que era marido de la actriz, “Paso decisivo” (1977), un drama en el que compartió protagonismo con la gran Shirley Mac Laine, y que le procuró de nuevo una nominación como mejor actriz a los Oscar, o “Jesús de Nazaret”(1977), producción televisiva que contó con un reparto deslumbrante como Burt Lancaster, James Mason, , Laurence Olivier, Peter Ustinov o nuestro incomparable e internacional actor Fernando Rey.
En la década de los setenta apareció en varios títulos siendo los más destacables “El prisionero de la Segunda Avenida” (1977), junto a Jack Lemmon y ,un aún desconocido, Sylvester Stallone, “La última locura”(1976), una original y divertida comedia dirigida por Mel Brooks que era marido de la actriz, “Paso decisivo” (1977), un drama en el que compartió protagonismo con la gran Shirley Mac Laine, y que le procuró de nuevo una nominación como mejor actriz a los Oscar, o “Jesús de Nazaret”(1977), producción televisiva que contó con un reparto deslumbrante como Burt Lancaster, James Mason, , Laurence Olivier, Peter Ustinov o nuestro incomparable e internacional actor Fernando Rey.
Con los 80, también llegaron excelentes producciones para Anne, por ejemplo la sobrecogedora obra de David Lynch “El hombre elefante”(1980), “Marco Polo”(1982) que fue un título filmado para la televisión,”Buscando a Greta” (1984),”Agnes de Dios” (1985), en la cual compartió cartel con Jane Fonda, y por la que fue nuevamente nominada a las Oscars, “Buenas noches, madre”(1986), o “La carta final” (1987), un estupendo drama romántico donde formó pareja con el formidable Anthony Hopkins.
Su vida privada, fue tan tranquila y discreta como ella misma. Se casó por primera vez en el año 1953, pero terminó divorciándose, para años más tarde encontrar el amor definitivo en la figura del gran cómico, aunque cuentan que tenía mal carácter, Mel Brooks. Con él compartió el resto de su vida, y aunque muchos se preguntaban ante esta unión, que era lo que tenían en común tan diferentes caracteres, la verdad era que Anne privadamente contaba con un sentido del humor excelente.
Un 6 de Junio del año 2005, nos dejó una de las actrices más importantes del siglo pasado. No la recordaremos como aquella diva inalcanzable y con glamour, o como aquella sexy mujer de perfecta anatomía…la recordaremos por algo más importante: por su calidad artística, por su cercanía, por sus ansias de superación y por contar con una filmografía inigualable.